Entre malezas, y reflexiones
Es junio, segundo día de
vacaciones, saco la basura y me encuentro con la no tan grata sorpresa que nuevamente
me robaron la bolsa de basura, pienso: ‘’ Estas experiencias me las perdería si
viviera en Europa’’, -y no crean que no me lo he planteado seriamente- no obstante,
probablemente como un mecanismo de defensa al trauma, he aprendido a reírme de
todos mis infortunios, luego noto, que el árbol que se encuentra al lado del
basurero, está cubierto de malezas, botellas de cerveza, y más basura, suspiro,
con tal profundidad, que , seguramente me descontaron 1 año de vida. Ese día, tenía
planeada una serie de actividades muy importantes para quién comienza sus tan ansiadas
vacaciones, cómo leer un libro pendiente, terminar algunas tareas relevantes, y
salir con unos amigos, pero reconozco que, también soy de las personas que,
cuando se instaura una idea en mi cabeza, es casi imposible arrancármela.
Me dispuse, escoba, palita,
y una desmalezadora manual, con la cual poca experiencia había tenido, a
limpiar aquel espacio, abandonado. Encontré una mina de insectos, restos orgánicos,
botellas, y unas lagartijas (conste que amo las lagartijas, pero en ese momento
me encontraba exhausta como para admirarlas). Con la desmalezadora no obtuve éxito,
por lo que manualmente arranqué todas las malezas, en ese momento, y por mi
falta de pericia en el tema, solo me dispuse arrancar todo lo que encontraba
con las manos de raíz, me sentí reflexiva.
Al momento, observaba
principalmente (quizás por la humedad del suelo, la riqueza orgánica del mismo,
debido a que por encima se coloca la basura, y otra suerte de circunstancias),
crecían dos tipos de malezas principalmente, una similar a un diente de león,
con una flor amarilla al lado, y hojas ovaladas, y otra muy resistente, que
parecía ‘’quebrar las baldosas del piso’’, a medida que levanto las baldosas,
más la encontraba a aquella incorruptible maleza, en redes, con pequeñas flores
en tono rojizo, y sus raíces aún mas ramificadas, subterráneas, y cuando más me
disponía a arrancarlas, parecían aparecer entre las grietas, en redes, como
diciéndome ‘’No nos vencerás’’, de un momento a otro, poco me importaba la
gente que estaba pasando por la vereda y pensé en voz alta ‘’Pero cuál es tu
función en el Universo, te crees invencible’’.
Al terminar mi arduo
trabajo, y conste que lo termine a medias, porque me quedaba dos cántaros más,
invadidas por estas ‘’Malezas’’, observe fijamente aquel espacio verde, y casi
amenazante dije para mis adentros, ‘’Otro día,les tocará a ustedes’’.
Ingresé a casa, con una sensación
de victoria incompleta, y me dispuse a investigar respecto a estas ‘’Malezas’’,
porque realmente quedé con la duda de su función en el ecosistema, y sentía
que se habían burlado de mi apellido ‘’Sapiens’’ en la cadena evolutiva, y para
mi sorpresa, efectivamente, me habían burlado por lejos, Euphorbia
rastrera, Hierba de la golondrina. En algunas culturas, se ha usado
diluida para tratar verrugas, hongos o afecciones cutáneas (por su látex
cáustico). Algunas especies de Euphorbia contienen
compuestos con potencial antimicrobiano o antitumoral.
Hypochaeris radicata (falso
diente de león), flores amarillas y hojas en roseta, atrae abejas y mariposas,
raíz pivotante, que airea la tierra y extrae nutrientes profundos como potasio,
hojas ricas en hierro y antioxidantes, amargas pero nutritivas (comestible).
En definitiva, en todos los
foros, y consultas con expertos, sugieren, que no sean eliminadas por completo,
si no son un problema estético, y dejarlas en zonas no transitadas para apoyar
la biodiversidad. Al final pareciera que todas tienen una función como
polinizadoras, o medicinales, en estudio.
Quede reflexionando respecto
a esa realidad, según afirmaba Friedrich Nietzsche, la moral tiene
criterios estéticos, caemos casi inconscientes ante esta premisa, casi
amenazante con aquello que no encaja con nuestros estándares, y no solo con lo
que nos es desconocido, si no, estético. A veces, en la vida nos falta frenar,
y analizar(nos), preguntar(nos), y re(plantearnos), ¿Quién dice que las ‘’Malezas’’
no tienen sus bondades?
¿Para cuando la historia de los otros cántaros?
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